Ayer en un momento me desperté y se me ocurrió este cuento o leyenda o como gusten...
LAS SOMBRAS
Hubo un tiempo en el que las sombras andaban libres, por ahi. Se movían como querían, no tenían reglas ni códigos. Solo debían ser eso, sombras. Sombras de eucaliptos, sombra de duraznos, sombras de algun monte. Hasta que llegó el humano y las sombras se vieron tentadas por atrapar a este nuevo ser. Sabían que era predecible, facil de atrapar, que podía tropezar dos o mas veces con la misma sombra.
Y así fue como lo hicieron. Los seres humanos empezaron a ser perseguidos por sus sombras. A veces por detrás, a veces por delante, pero nunca más se pudieron liberar de ellas. A veces las sombras cometen actos lujuriosos que ni siquiera el ser humano se animaría a realizar. Mientras un ser humano está en una reunión con su principal, su sombra puede que le toque el culo a la sombra del principal, y lo que es más maravilloso es que ésta otra no responda y le agarre alguna otra parte de su cuerpo.
Las sombras no saben tanto de distancias ni de planos. Están ahi, se adaptan a las superficies, se chocan y siguen. No se paran a pensar, no sufren, no pagan impuestos, no sufren crisis existenciales. Solo tienen temor a las noches sin luna, a las habitaciones oscuras
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